La mujer debe participar en el cambiante mundo laboral desde su feminidad y no adoptar el estilo de liderazgo masculino para tener éxito.
Así lo asegura la directora general de ManpowerGroup Latinoamérica, Mónica Flores, quien agrega que, según un estudio de su organización, que en la sostenibilidad del talento de la fuerza laboral, se reconoce quepersiste el debate sobre la igualdad entre los hombres y las mujeres.
“Pero lo cierto es que no son iguales. Cada uno tiene su propio estilo de liderazgo; por ejemplo, las mujeres incentivan, mejoran la comunicación entre colaboradores y se enfocan en la calidad y el análisis, en tanto que los hombres tienen una comunicación más directa”, subrayó en entrevista.
Detalló que aunque ambos comparten atributos muy destacables, aún prevalecen estereotipos que propician que la actuación femenina tenga algunas connotaciones no tan positivas. Mientras que en el caso de los hombres ser asertivos, en en ellas se considera que ese atributo significa ser agresiva; ser líder se entiende con ser controladora; a la capacidad networker se le considera ser chismosa.
Asimismo, ser innovador para el hombre es ser idealista para la mujer; ser fuerte se confunde con prepotencia y ser analista en la mujer es interpretado como indecisión.
“En medio del debate sobre qué distingue a hombres y mujeres, la realidad es que prevalece la inequidad de oportunidades. Las mujeres encuentran obstáculos en su crecimiento profesional, entre más altos son los puestos, menor es el número de mujeres que los ocupan”, afirmó.
Mónica Flores comentó que en el sector empresarial mundial, ellas no son más del 24 por ciento en puestos directivos, a pesar de que aportan una mayor perspectiva y mejores resultados financieros.
Otro dato que agrega es que cada 1% de incremento en el número de mujeres en parlamentos está correlacionado con el incremento en el monto de fondos destinados a educación.
Indicó que las mujeres también enfrentan barreras en sectores que son percibidos “masculinos”, entre los cuales están las ciencias y tecnología, donde la participación es mayoritariamente de varones.
Sin embargo, dijo, los resultados de la prueba PISA son evidencia de las mujeres destacan de manera sobresaliente en ese tipo de áreas, por lo que no debiera existir poca presencia de ellas en ese terreno educativo y laboral.
Ello quedó demostrado en que en 59 de los 65 países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), las niñas obtuvieron mejores resultados que los niños en literatura, matemáticas y ciencias.
Ante eso, Flores enfatiza que se debe dejar de hablar de género y empezar a hablar de talento. “Los términos equidad e igualdad son cosa del pasado. Hoy en día debemos hablar de partnership (la cooperación entre personas trabajando juntas para lograr una meta en común)”.
Otro reto a superar por las mujeres líderes es la culpa, pues el 51% de las madres que trabajan se siente culpable por no pasar suficiente tiempo con sus hijos, mientras 55% de las que no trabajan se siente culpable por no contribuir financieramente, puntualizó.
Fuente: DiarioPyme